El líder socialista Pedro Sánchez, durante la moción de censura contra Mariano Rajoy.
El líder socialista Pedro Sánchez, durante la moción de censura contra Mariano Rajoy.

El presidente del Gobierno ha asegurado, en una entrevista al diario El País, que uno de los compromisos principales que tiene es que su legislatura «acabe con una ley de eutanasia en nuestro país y que sea reconocido como un servicio por parte de la sanidad pública, un servicio fundamental».

El portavoz en la Cámara, Adrián lastra, ya aseguró en una rueda de prensa que el PSOE pretende facilitar el derecho a la eutanasia a las personas con enfermedad o discapacidad grave que no tengan más opciones de tratamiento.

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Para los socialistas, la diferencia del texto que proponen respecto a la muerte digna es que ésta es inminente o la muerte está cercana, mientras que la eutanasia es cuando un paciente «con un sufrimiento insoportable» decide que no quiere seguir viviendo a pesar de que su muerte no esté cerca.

Además, para hacer efectiva esta iniciativa se requiere cambiar el artículo 143 del Código Penal que penaliza a aquellos que ayudan a otra persona a morir, mientras que la ley de muerte digna no requiere un cambio de dicha normativa.

«Traslado inmediato de los restos de Franco»

Además, el presidente del Gobierno, ha dicho en la entrevista que el PSOE quiere «que el traslado de los restos de Franco sea inmediato». «Creo que una democracia madura como la nuestra, europea, no puede tener símbolos que separen a los españoles. Este Gobierno va a cumplir con el mandato del Congreso de los Diputados de 2017 de convertir el Valle de los Caídos en un lugar de reconciliación», ha afirmado.

El anuncio de exhumar los restos de Franco de la Basílica del Valle de los Caídos ha provocado a buena parte de la ciudadanía, que no entiende que se presente la Ley de Memoria Histórica como “una ley de reconciliación”, pero sus acciones sean contrarias “a una parte muy significativa de los españoles, tanto los creyentes cristianos como los que respetan los símbolos de los creyentes y su derecho a la libertad religiosa”.

Por esa razón, más de 40.000 personas mandaron una petición, difundida por HazteOir.org con el título ‘La basílica no se toca’,  a Pedro Sánchez, en la que se encontraba mensajes como este: «Le pido que su Gobierno respete la basílica y a la comunidad benedictina que desempeña labores espirituales y culturales dentro de la misma, en aras de una verdadera concordia y entendimiento entre todos los españoles de hoy».

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