El Gobierno de los Estados Unidos ha publicado un mensaje con motivo del día nacional de la santidad de la vida apenas unas horas de que se produzca de manera oficial el traspaso de poderes y comience el mandato de Joe Biden y Kamala Harris, que han expresado de forma inequívoca su respaldo al crimen del aborto y su industria.
El mensaje comienza proclamando sin complejos que «cada vida humana es un regalo para el mundo. Ya sea nacido o no nacido, joven o viejo, sano o enfermo, toda persona está hecha a la santa imagen de Dios» para a continuación, criticar el fallo Roe vs Wade que permitió el aborto en los Estados Unidos:
«Este mes, celebramos casi 50 años desde la decisión Roe v. Wade de la Corte Suprema de los Estados Unidos. Este fallo constitucionalmente defectuoso anuló las leyes estatales que prohibían el aborto y ha provocado la pérdida de más de 50 millones de vidas inocentes«.
La Administración Trump, en uno de sus últimos actos, alaba a los provida, «un poderoso movimiento para despertar la conciencia de Estados Unidos y restaurar la creencia de que cada vida es digna de respeto, protección y cuidado». No en vano, se subraya que «durante la última década, la tasa de abortos ha disminuido de manera constante, y hoy, más de tres de cada cuatro estadounidenses apoyan las restricciones al aborto».
Medidas históricas de Donald Trump en relación a la vida humana
El presidente Donald Trump recuerda que durante su mandato tomó decisiones importantes parta la protección de la vida humana tanto en el interior de los Estados Unidos, como en el extranjero.
Así, recuerda que restableció la llamada Política de la Ciudad de México del presidente Ronald Reagan que impide la financiación del aborto con fondos federales; modificó el título X para impedir parcialmente la financiación de la industria del aborto con fondos federales; protegió la objeción de conciencia del personal sanitario y de las organizaciones religiosas; restauró el derecho de las agencias de adopción a ser coherentes con su defensa de la familia; y firmó la llamada Declaración del Consenso de Ginebra «que refuerza los esfuerzos globales para brindar una mejor atención médica a las mujeres, proteger todas las vidas humanas y fortalecer a las familias».
Para Donald Trump «restaurar una cultura de respeto por lo sagrado de la vida es fundamental para resolver los problemas más urgentes de nuestro país», motivo por el que fue el primer presidente en ejercicio en acudir en persona a una Marcha por la Vida.
Por otro lado, Trump considera un avance provida el nombramiento de jueces originalistas, que en la escuela de Antonin Scalia, pueden favorecer la protección de la vida humana: «Durante los últimos 4 años, he designado a más de 200 jueces federales que aplican la Constitución tal como está redactada, incluidos tres jueces de la Corte Suprema: Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett».
En este texto, que supone una suerte de testamento provida del presidente, Trumphace un llamamiento «al pueblo estadounidense para que continúe cuidando a las mujeres en embarazos inesperados y apoye la adopción y el cuidado de la crianza de una manera más significativa, para que cada niño pueda tener un hogar lleno de amor».
«Pido a todos los ciudadanos de esta gran nación que escuchen el sonido del silencio causado por una generación perdida para nosotros, y luego alcen la voz por todos los afectados por el aborto, tanto visibles como invisibles».
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