Imagen referencial /Pixabay
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Jason Goodwill, 51 años, natural del estado de Pensilvania, ha sido detenido por realizar abortos a domicilio para ocultar las violaciones sistemáticas perpetrados contra su hija y su hijastra a lo largo de 14 años.

Según la policía estatal de Pensilvania, sus víctimas tenían 12 años y 20 años y ambas niñas estaban bajo la custodia de Goodwill cuando ocurrieron los crímenes. La investigación se remonta a 2006, cuando su hijastra tenía siete años. Se enfrenta a 20 cargos de violación.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

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La niña de 12 años ha confesado a la Policía que, como resultado de los abusos que ha sufrido desde qu etenía 10 años quedó embarazada varias veces, situaciones que el perpetrador de estos crímenes atajaba realizando abortos caseros, probablemente mediante la inyección de químicos.

Según el testimonio de la menor, en una ocasión en la que sí llegó a dar a luz, en 2014, Goodwill la separó del niño que falleció «en algún momento», según detalla LifeNews.

La Asociación para la protección del bebé no nacido (SPUC, por sus siglas en inglés) ha denunciado que el impulso de las regulaciones favorables a la práctica del aborto en casa en el Reino Unido corren el riesgo de servir a abusadores para ocultar sus crímenes como en el caso de Goodwill: «Es deplorable que durante un período de creciente violencia doméstica, el gobierno haya implementado regulaciones de aborto imprudente que ponen a las mujeres vulnerables en mayor riesgo de verse obligadas a someterse a un aborto y les da a los hombres viciosos el poder de ocultar y continuar con su abuso».

No en vano a principios de año SPUC expuso el caso de un farmacéutico de Birmingham y su mujer obligaron a niñas y mujeres a someterse a abortos para matar a los hijos fruto de abusos sexuales a lo largo de 20 años.

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