La Cámara de Representantes de Iowa (Estados Unidos) y el Senado estatal han aprobado un proyecto de ley para acabar con la financiación de 400.000 dólares a doce clínicas de Planned Parenthood. Además, esperan aprobar una ley que prohíba abortar a partir de las 20 semanas.
La medida no excluye de manera específica a Planned Parenthood, pero niega todo tipo de fondos estatales a aquellas organizaciones que practiquen abortos, tal y como recoge InfoCatólica. De esta manera, el estado se ahorrará casi 3 millones de dólares de dinero federal, ya que estos gastos forman parte de las asignaciones estatales.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl presupuesto de 1.770 millones de dólares en salud y servicios sociales ha sido aprobado a principios de esta semana por la mayoría republicana en la Cámara y por el Senado estatal en una votación de 28-21. Además, se espera que el gobernador Terry Branstad lo apoye.
Más de 3.000 personas recibieron ayuda de Planned Parenthood
La Agencia de Servicios Legislativos de Iowa ha dado a conocer que el año pasado al menos 3.781 ciudadanos de Iowa recibieron servicios de planificación familiar de Planned Parenthood a través de fondos estatales y federales.
Por su parte, la Conferencia Católica de Iowa ha defendido, que aunque los fondos destinados a Planned Parenthood no estaban destinados de manera directa a realizar abortos, si ayudó a pagar la operación completa, la cual realiza abortos. “Creemos que los fondos públicos no deben subvencionar el negocio del aborto cuando hay muchos otros proveedores de salud disponibles”, han afirmado.
Desde la Conferencia Católica de Iowa cree que “el aborto es un ataque directo a la vida humana y la dignidad, y las clínicas de aborto no proporcionan una amplia gama de atención médica”.
Mientras que la portavoz de Planned Parenthood of the Heartland, Rachel López, ha insistido en que los republicanos “deberían estar avergonzados de sí mismos. Están jugando juegos políticos, poniendo en juego las vidas.
Para Jenifer Bowen, directora de la asociación provida Iowa Right to Life, los “estadounidenses están enfermos y cansados de financiar la industria del aborto”.